Comprar Bolsas de plástico en Madrid

Por lo general, las bolsas de plástico pueden estar hechas de polietileno, ya sea lineal, de baja o de alta densidad, o de polímero de plástico (no biodegradable en éste caso).

Puede tener un espesor que varía entre los 18 y los 30 micrómetros, también en parte, de ello depende su resistencia.

Según la función para la que concibamos la bolsa existen distintos tipos: para hablar de la bolsa típica que te dan en el supermercado, hablamos de la bolsa tipo camiseta por la forma de las asas. Se trata de una económica y con poco material y fabricada con polietileno de alta densidad, que puede soportar hasta 12 kg. Hay otros tipos, como las de laminación de polipropileno, que se usan para envasar alimentos higroscópicos como la harina y que la protegen de la humedad.

Podemos usar la tecnología del bag- in- box para las bolsas de plástico que contienen líquidos, o para envasar azúcar, patatas, etc. y para soportar y transportar hasta 50 kg. También las hay que son especiales para cocer cosas en su interior (las boil- in- bag), en las que se envasan alimentos crudos o semicocidos, como la leche para hacer queso, y, también existen las que son para proteger alimentos al alto vacío.

Como ves, existe un tipo de bolsa para cada necesidad.

Por lo general, la fabricación de las bolsas de plástico incluye la extrusión de la resina usando el método de soplado o de dado, y su impresión, su personalización si quieres, se suele hacer usando la flexografía o el roto grabado. Además, es posible que se haga un proceso de barnizado o laminación usando para ello otra capa de plástico, y, para terminar, se usa el calor y la presión para soldarla y sellarla.

De todos los usos que tiene el petróleo y de todo el que se obtiene en todo el mundo, a la industria del plástico solo se destina el 5%, y solamente una mínima parte de este total va destinado a la industria de las bolsas de plástico, el resto va para la fabricación de partes de automóviles y productos de consumo como teléfonos o similares, además de botellas de leche, refrescos…

Una de las preocupaciones que existen respecto a las bolsas de plástico es que no son amigables con el medio ambiente, como las de papel, pero, si te lo planteas, puedes usarlas después para un montón de cosas, como por ejemplo, recoger los excrementos de tus animales, forrar cosas, usarlas a modo de embalaje para cuando vayas a enviar o transportar cosas de un lado a otro, puedes usarlas, por ejemplo, para proteger alimentos en el frigorífico o en el congelador, para hacerlas parte de un disfraz para ti o para niños si hay en tu casa… las posibilidades de reutilización de una bolsa de plástico son casi infinitas. El límite solamente lo pone tu imaginación.